El edificio del nuevo Espai de la Música de Castelló que se construirá en el PAI Taxida junto a la Ciudad de la Justicia será un recinto sostenible y contará con cerámica. Así lo recogen los pliegos de condiciones para el concurso de ideas que la Generalitat valenciana, a través de la Conselleria de Educación y Cultura, tendrá listos en septiembre con el fin de que las empresas que opten al concurso de ideas conozcan los requisitos indispensables y generales que deberán cumplir sus respectivas propuestas.
Así, tal y como ha podido saber el periódico Mediterráneo, estas instalaciones tendrán que contar con las suficientes mejoras para no repetir las deficiencias con las que cuenta el actual edificio del conservatorio profesional de música y de danza, además de convertirse en un recinto emblemático del Castelló del siglo XXI en materia cultural. Unos problemas de los que se ha hecho eco el Síndic de Greuges porque ha instado al Ayuntamiento de Castelló y a Educación a comprobar la insonorización del actual conservatorio.
Además, las nuevas instalaciones junto a la ronda de circunvalación tendrá que ser eficiente en lo que en tecnología se refiere y autosuficiente en materia energética, es decir, deberán estar preparadas para hacer frente al reto energético que se presenta para adaptarse a la emergencia climática. Por este motivo, todos los materiales utilizados en la nueva edificación cumplirán con esta función.
Por otra parte, el nuevo conservatorio de Castelló ha de mirar más allá de la provincia y convertirse en un espacio cultural de ámbito internacional.
Por otra parte, y con el fin de informar sobre estas cuestiones a los directores de los conservatorios, la Conselleria de Educación mantuvo recientemente una reunión con estos responsables educativos para darles a conocer el estado en el que se encuentra el proceso de construcción del edificio.
Para el concejal de Educación de Castelló, Francesc Mezquita, «el nuevo conservatorio tiene que ser un edificio emblemático», además de «una obra capital para Castelló, pero también con un marcado carácter internacional». Mezquita remarcó la importancia de que la propuesta se consolide como un proyecto «con un coste energético mínimo y facilitar la inclusión».
