La Conselleria de Cultura recomienda, en un escrito remitido al Ayuntamiento de Castelló, dar un giro de 90 grados a la escultura del Perot y los bueyes que realizó el escultor Juan Bautista Adsuara y que, actualmente, ocupa el centro de las obras de remodelación del paseo de la avenida del Lledó, de modo que el conjunto quede orientado hacia la basílica de la patrona de la capital de la Plana. La pieza de piedra caliza blanca realizada en 1959, según recoge el proyecto de remodelación de este vial, se pretende trasladar al parque del Auditori, en las inmediaciones de su ubicación actual debido a los trabajos de reforma del lugar donde se encuentra instalada desde hace años.
Los técnicos de la Dirección territorial de Patrimonio de la Conselleria hicieron llegar un informe al Ayuntamiento en el que determinaron, a modo de sugerencia, que la escultura «recupere su sentido original y cultural como la diseñó y esculpió Adsuara, puesto que conecta visualmente la escultura y la basílica, conexión que hace evidente el sentido de la escultura como Troballa de la Mare de Déu del Lledó, explicaron fuentes de la administración autonómica.
Además, desde la Conselleria de Cultura también apuntaron, como consejo, que la escultura «no tiene que desplazarse», al contrario de lo que sugiere el proyecto de reforma de la avenida de Lledó que maneja el Ayuntamiento.
Cabe recordar que el anuncio del traslado de la escultura (propiedad de la Fundación Caixa Castelló) a unos metros del sitio que ocupa hoy en día ha propiciado una campaña de recogida de firmas en change.org, donde a fecha de ayer había casi 600 apoyos (en una semana) para que esta se mantenga donde está.
Interés artístico
Por otra parte, los mismos técnicos de la Conselleria de Cultura también señalaron que la escultura del Perot y los bueyes de Adsuara de la capital de la Plana «tiene evidentes señales de interés artístico y patrimonial, según se establece en el artículo 1.2 de la Ley 4/1998 de 11 de junio del Patrimonio Cultural Valenciano, por lo que para favorecer su protección como bien del patrimonio cultural valenciano, se debería adscribir al Museo de la Ciudad de Castelló (MUCC)».
