Municipal

Castelló planea abrir más accesos peatonales al parque Rafalafena

La retirada de las vallas en la mejora de la avenida de Lledó ha revitalizado la zona

La reforma de la avenida de Lledó integra el parque Rafalafena en el paisaje con la retirada de las vallas.

La reforma de la avenida de Lledó integra el parque Rafalafena en el paisaje con la retirada de las vallas. / Gabriel Utiel

Enrique Ballester

Enrique Ballester

El Ayuntamiento de Castelló estudia la manera de mejorar la accesibilidad al parque Rafalafena, que ha ganado usuarios tras abrirse a la ciudadanía con la retirada de las vallas que lo flanqueaban, en el marco de la reforma de la avenida de Lledó.

Además, el portavoz del equipo de gobierno, José Luis López, confirmó este viernes que las obras de mejora del emblemático vial avanzan al ritmo previsto y deberían estar finalizadas antes del próximo mes de febrero.

En paralelo, López informó ayer que la Junta de Gobierno de la presente semana acordó la aprobación del expediente de contratación de las obras que mejorarán los accesos a las calles Doctor Rous, Sanz de Bremond y San Isidro Labrador, con un presupuesto de 230.702,06 euros, más 48.447,43 euros, en concepto de IVA (21%) y un plazo de ejecución de cuatro meses, en el entorno de la avenida de Lledó. Estas calles formarán un cul de sac una vez concluyan las obras de la vía central y con la actuación se busca facilitar el acceso a los vecinos.

Recta final

La obra de mejora de la avenida de Lledó encara de este modo la recta final. Se espera que esté acabada en unas cuatro semanas, por lo que el consistorio podría recepcionar los trabajos a finales de enero o a principios de febrero. La actuación ha contado con un presupuesto de 3,3 millones de euros cofinanciados al 50% por la UE --a través de los fondos Feder- y el Ayuntamiento.

El consistorio obtuvo estos fondos a través de la convocatoria de subvenciones a «proyectos singulares de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono», en el marco del programa operativo Feder de crecimiento sostenible. Por ello, el objetivo de la actuación que ahora encara sus últimos detalles es «transformar este vial emblemático en un itinerario accesible, seguro y sostenible en el que convivan armónicamente» peatones, bicicletas y vehículos a motor. Una de las mejoras en este ámbito es el nuevo paseo central a lo largo de todo el recorrido de 1,5 kilómetros, desde la plaza María Agustina hasta la basílica del Lledó.

Los tramos

Desde un principio, la planificación de las obras se dividió en tres tramos, con el inicio en el trazado más alejado del centro urbano, el comprendido entre la rotonda de la ronda Norte y la basílica. Después, los trabajos se trasladaron al segundo de los tramos; entre la rotonda de la ronda Norte y la de Tombatossals. Y, en los últimos meses, el grueso de las obras se han centrado en el tramo entre Tombatossals y la plaza María Agustina, donde desemboca la avenida.

La actuación ha recibido tanto críticas como apoyos de la ciudadanía. Entre los últimos, se valora la inclusión del parque de Rafalafena en el paisaje, con la retirada de las vallas. El Ayuntamiento de Castelló estudia ahora la apertura de nuevos accesos peatonales al mismo. 

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