Primer día sin la cruz en el Ribalta de Castelló

El primer día sin la cruz en el parque Ribalta transcurrió ayer con total normalidad. Solamente una patrulla de la Policía Local enfrente del lugar que hasta el miércoles acogía el lábaro de hormigón y y otra pareja de agentes en las inmediaciones de la iglesia de Santo Tomás de Villanueva ponían de manifiesto lo acontecido el día anterior. En el primero de los escenarios, ninguna obra en marcha ya que la empresa continuará los trabajos la semana que viene. Ahora, los operarios se tienen que centrar en la remodelación de esa zona del parque que acogerá especies arbóreas inusuales en el Ribalta para devolverle la imagen de 1926. La firma adjudicataria tiene de plazo seis semanas a contar desde el pasado 3 de enero.

Vallas de protección

En el templo de Rafalafena, la cruz comparte espacio con la pieza de hierro que será recolocada, en unos días, en otra parte de la explanada. También se retirarán los puntales y el entablillado de protección con refuerzo próximamente. Unas vallas las protegen después de que el miércoles los trabajos de instalación terminaran a medianoche y tan solo algunos vecinos se pararon ayer en la verja que separa la calle del solar de la iglesia donde ha quedado ubicada.

Vídeo: Momento histórico, retiran la cruz del parque Ribalta

Precisamente estas labores finales fueron seguidas in situ por escasas personas ya que estas terminaron muy entrada la noche. Allí, y con el fin de asegurarse de que no se produjeran daños en la cruz por respeto al sentimiento religioso de la misma, tan solo estuvieron el concejal de Obras y Proyectos Urbanos del Ayuntamiento de Castelló, José Luis López; el coordinador general de Urbanismo, Fernando Calduch; la jefa de obra de la empresa concesionaria; el arquitecto del obispado, Ángel Albert; el cura de la iglesia de Santo Tomás de Villanueva; el representante de la empresa que trabaja para el obispado; y los operarios que materializaron la colocación de la cruz en su nueva ubicación en la capital de la Plana. 

El catálogo de vestigios aún recoge las 6 calles franquistas

El catálogo de vestigios franquistas de la Conselleria de Calidad Democrática todavía recoge las seis calles con nombres franquistas pese a que el Ayuntamiento de Castelló ya aprobó retirarlos el pasado año e incluso ha colocado las placas con la nueva nomenclatura. Desde la administración autonómica confirmaron a este diario que se cambiarán «pronto» aunque no fecharon el momento de esta decisión. Además, si bien se prevén quitar estos nombres del documento junto al de la cruz del Ribalta, fuentes de la Conselleria de Calidad Democrática afirmaron que no sucederá lo mismo con los de Segarra Ribes, doctor José Clará y doctor Vicente Altava, que seguirán incluidos en el informe como vestigio franquista y con orden de retirada por parte de la Generalitat.

Sobre estos tres nombres, las mismas fuentes oficiales afirmaron que al tratarse de calles, la competencia para quitarlos o no es del Ayuntamiento de Castelló. En este caso, y a diferencia de los otros seis, el consistorio alegó a la decisión de retirarlos al considerar que estos tres castellonenses no habían actuado en comisiones de depuración.

Con la retirada de la cruz, el pasado miércoles, Castelló concluye su plan de actuación para la erradicación de estos vestigios en la capital de la Plana que incluía los seis nombres de calles y el lábaro del Ribalta.