La afición del CD Castellón nunca falla. A las duras y a las maduras ha estado al lado del equipo, en las época frustrantes de Tercera, en las sufridas en Segunda B y desde la distancia en LaLiga SmartBank. Y la temporada próxima no va a ser diferente para los orelluts. Después del tremendo disgusto por el descenso del equipo del fútbol profesional a la novedosa Primera RFEF, ya se piensa en positivo y, en una semana en marcha, en la campaña de abonos un total de 4.278 albinegros ya han renovado su pase.

Es, sin duda alguna, una grandísima cifra para un Castellón que lleva cuatro temporadas consecutivas batiendo su récord de abonados. Desde la última temporada en Tercera División hasta la pasada campaña 2020/21 en la que el equipo militó en la antes denominada Segunda División. Y quién sabe si por quinto año consecutivo se consigue batir el récord de abonados.

Si se echa la vista atrás, en la primera semana de campaña de abonos de hace un año, para sacarse el pase para LaLiga SmartBank, se alcanzó la cifra de 6.050 fieles con el carné en la mano. En estos momentos son más de 4.278 para hacerlo en Primera RFEF. 

La 2017-18 en Tercera

Fue en la que se logró el ascenso. El club hizo una gran apuesta para captar al máximo número de seguidores abonados y se consiguió batir el récord que tenía el Oviedo en esta categoría y el propio de la entidad castellonense: 12.70. Una temporada perfecta. Máximo respaldo de la afición y al final ascenso a Segunda División B tras derrotar al Portugalete en el Estadio Castalia con aquel inolvidable gol de David Colomer con el que se daba un importante paso al frente.

La 2018-19 en Segunda B

Se dejaron atrás siete amargas temporadas en Tercera rozando la desaparición, sin presentarse a jugar un partido por huelga de los futbolistas... Fue una época horrible, pero se llegó a la división de bronce y la afición se volvió a entregar con 13.840 abonados. Fue lo mejor de una temporada en la que se rozó el descenso a Tercera. En la última jornada, ganando al Barcelona y de rebote por el empate del Teruel en Alcoi, se logró evitar el descenso. Salvación celebrada como si de un ascenso se tratara.

La 2019-20 en Segunda B

A pesar de que la última jornada de la anterior campaña no fue apta para cardíacos, el nuevo curso se empezaba casi de cero, de nuevo en Segunda B. Limpieza en el vestuario y proyecto nuevo. No falló la afición porque esa temporada, que acabó con éxito total, el club vendió 14.000 abonos. Llegó la pandemia y un tercio de la temporada no se jugó. Sí el play-off con emoción del primer al último partido, ganado ante el Cornellà y celebrando que una década después se volvió al fútbol profesional.

La 2020-21 en Segunda

En plena pandemia se puso en marcha la campaña de abonos con cifra límite por las exigencias de la LFP: 14.200. Se vendieron todos e incluso hubo lista de espera. Salvo las dos últimas jornadas en casa (más la Copa frente a Las Palmas), abonados y aficionados albinegros no pudieron acceder a las gradas. La temporada deportiva acabó en fiasco: descenso. Esta próxima campaña se debutará en la nueva Primera RFEF