El CD Castellón no está del todo satisfecho con el reparto televisivo que aprobó este martes la Real Federación Española de Fútbol para las próximas tres temporadas de la nueva categoría Primera RFEF. 

El acuerdo, por el que la Federación recibirá 9.490.000 euros anuales de Fuchs Sports International (entidad socia de Footters) «para repartir entre los clubs», se distribuye entre las siguientes variables: solidaridad (40%), puntos obtenidos durante la temporada anterior (30%), resultados de audiencias de televisión (20%) e incentivos para la cantera (10%).

Una distribución que para el Castellón, en declaraciones de su director general Jordi Bruixola, no es del todo «justo». La razón por la que la entidad de La Plana no está completamente satisfecha con el reparto es que no se tiene en cuenta prácticamente a la repercusión mediática de cada club. Y es que solo un 20% de los 365.000 euros que le corresponden de media a cada club van directamente ligados a lo que generan en concepto de audiencia.

Opción alternativa

Para Bruixola, «el Castellón es uno de los clubs con más tirón mediático y preferíamos otro sistema de reparto que ponderara más lo que cada uno genera en televisión». Eso sí, reconoce que ha sido «muy difícil» en un año marcado por la pandemia crear la Primera RFEF y que en las próximas temporadas «se mejorará en todos los aspectos». 

En cuanto a esta nueva competición, el director general del club explica que «no será como la antigua Segunda B» y los gastos serán «muchos mayores». «Los desplazamientos serán mucho más lejanos y el coste de la plantilla también es mayor, porque necesitas jugadores de más nivel», comenta. 

En este sentido, descarta que el club vaya a gastar todos los ingresos generados por las ventas de Álvaro Fidalgo al América (un millón de euros), Rubén Díez al Tenerife (250.000 euros) y la ayuda al descenso por bajar de LaLiga SmartBank (en torno a 1,5 millones de euros): «Estamos en un momento muy negativo en la economía del fútbol. Los clubs han perdido mucho dinero por la pandemia y apenas realizan grandes traspasos, por eso hay que valorar las operaciones que hemos hecho. El Castellón también ha sufrido los efectos del covid y se han reducido mucho los ingresos, sobre todo, por el cierre de Castalia durante casi una temporada y media». 

En este sentido, apunta que «en condiciones normales, en un mundo sin coronavirus, las ventas de Fidalgo, Rubén y la ayuda de LaLiga nos habría permitido destinar más dinero directamente a fichajes». Aún así, Bruixola recuerda que el Castellón «ha hecho un gran equipo y peleará por estar en los puestos de arriba». 

No obstante, la plantilla del Castellón no está cerrada y la dirección deportiva continúa rastreando el mercado para cubrir las tres fichas que tiene libre (dos sénior y un sub-23). En principio, la idea es la de incorporar a dos centrocampistas y un lateral, pero no se descarta que uno de los hombres del centro del campo se pueda cambiar por uno más ofensivo si aparece un chollo, ya que Rubén Díez era mediapunta pero fue el máximo goleador del equipo la pasada temporada. 

Una posibilidad que no descartó Bruixola: «De eso se ocupa la secretaría técnica y está trabajando en ello. Han construido una plantilla muy competitiva y estoy seguro que si surge una opción de mejorarla antes de que acabe el plazo lo harán», finalizó.