La crónica | El Castellón no resiste el acoso del Nàstic pero mantiene el liderato (2-1)

Los muchachos de Rubén Torrecilla hincaron la rodilla en el minuto 84 con un gol de falta directa de Javi Bonilla. Fue un tanto que castigaba en exceso a un conjunto albinegro que mereció más. Los orelluts se adelantaron en el marcador, pero acabaron mordiendo el polvo de una derrota que no habían encajado desde la primera jornada.

Los onces fueron los esperados, aunque en el Castellón destacó sobremanera la ausencia de su máximo goleador, un ex del Nàstic de Tarragona como es Dani Romera. El almeriense comenzó el choque desde el banquillo. Su puesto lo ocupó el brasileño Fabrício dos Santos. Además, por lo visto sobre el terreno de juego del Nou Estadi Costa Daurada, ambos conjuntos formaron con un once muy similar: un 1-4-3-3. Dos equipos con muchos años de experiencia en sus onces y muy buenos futbolistas.

El duelo de gallitos de la categoría no decepcionó en una primera parte jugada de poder a poder, donde se jugó con mucha intensidad y en la que los dos equipos disfrutaron de un buen número de llegadas a la portería rival. Esa igualdad que presidió la primera parte fue justificada con el 1-1 con el que se llegó al descanso.

El Nàstic salió apretando fuerte. Jugando mucho por la banda izquierda suya con Joan Oriol y Aaron Rey; y cuando encontraron dificultad lo intentaron por la derecha con Pedro del Campo. El Castellón también entró mucho por las bandas. En especial por la derecha, donde corrió mucho el brasileño Fabrício para poner centros, cuando él era el 9 en este partido.

Pedro del Campo fue el primero en lanzar. Tiro ajustado al palo que atajó Alfonso Pastor (min. 4). Luego llegaron los intentos errados de Fabricio, dos de Pablo Hernández y uno de Josep Calavera. El Castellón, valiente, intentó romper todas las líneas del conjunto tarraconense que saltó intentando llevar la iniciativa.

 La emoción para el final del primer tiempo

El Nou Estadi rugía. Había un gran ambiente. Había buen juego, ocasiones, pero el gol se les estaba resistiendo a los dos equipos. Al filo del descanso el cántaro se rompió de tanto ir al área rival. El primero en pegar fueron los albinegros con un centro-chut que de Manu Sánchez que se le envenenó al portero Manu García y al final el cuero se coló al fondo de las mallas. Cuarto gol para el lateral del conjunto castellonense.

Pese a ese gol en al filo del descanso, los tarraconenses no se amilanaron. El veterano lateral zurdo Joan Oriol se marcó una gran carrera, pudo con todo y contra todos y, al final, su tiro cruzado impactó en el palo izquierdo de Alfonso y acabó besando las mallas. Era el minuto 47 del primer tiempo. Una lástima. Se llegó al descanso con esa igualdad.

 Sin cambios

El segundo acto y definitivo arrancó sin novedades en ninguno de los dos onces. David Cubillas calentó con mucha intensidad, pero no salió de refresco. Y para abrir boca nada más reanudarse el duelo de titanes, dos acciones destacadas. En el 49', y a la salida de un córner, el cuero se estrelló en las manos del central del Castellón, Óscar Gil, pero el árbitro dijo que no había pasado nada.

Minuto y medio después, en la otra área, Raúl Sánchez se plantó sólo ante el portero local y éste, como un portero de balonmano, con el pie rechazó a saque de esquina. Una lástima. Fue, sin duda alguna, la ocasión más clara de los muchachos de Rubén Torrecilla.

Con el paso de los minutos el partido perdió la efervescencia inicial. Era imposible jugar así los 90 minutos. El Castellón, que llegaba con peligro al área rival, tuvo una ocasión de oro en el minuto 61 con un remate desviado de Giorgi Kochorashvili. Luego no pasó nada en las dos áreas hasta el minuto 84, cuando una falta escorada de Javi Bonilla acabó besando las mallas de la portería de Alfonso Pastor. Y ahí murió el partido. No hubo para más. El Castellón acabó ahogado en el área rival.