CD Castellón | El discreto encanto del fútbol de Sergio Dueñas, Moyita

En agosto, el Castellón visitó al Eibar en la primera jornada de Liga. Fue un día de estrenos múltiples, y uno de ellos fue protagonizado por Moyita. A escasas semanas de cumplir 32 años, el centrocampista albinegro debutaba en Segunda. El premio a toda una vida.

Sergio Dueñas, alias Moyita, (Osuna, Sevilla, 1992) es uno de los futbolistas más particulares de la plantilla. No tiene nada que hacer frente a la exuberancia física de muchos de sus compañeros, pero conserva un hueco en el plantel por otras virtudes, quizá únicas. Es el discreto encanto del fútbol de Moyita: asea, ordena y equilibra.

La crónica | El Castellón logra una brillante remontada de plata ante el Almería (4-1)

En busca de un mayor control, Johan Plat ha recuperado al más cerebral de sus centrocampistas. Los buenos minutos en el tramo final del duelo con el Albacete tuvieron recompensa: titularidad en Santander (no jugaba de inicio desde enero) y continuidad el viernes en el SkyFi Castalia, en el 4-1 contra el Almería. Moyita puso de su parte: anotó el 1-1 que arrancó la remontada en una clásica llegada al área.

No menos clásico es su característico giro. La volteta de Moyita define al futbolista. Es de los que se la queda y de los que siempre la pide. Esconde la pelota sin quitársela de encima, consciente del riesgo que asume. Porque jugando en el alambre, a veces se cae. Volviendo al debut en Eibar, no fue el soñado. En el primer minuto perdió un balón que terminó en gol del contrario.

Un futbolista peculiar

Pero no por ello iba a cambiar Moyita su manera de entender el fútbol. Ni lo hizo ese día ni el resto de la temporada. Es el estilo que le ha llevado a ser peculiar toda su carrera. Formado en el equipo de su localidad natal, pasó por la cantera del Real Betis pero no terminó de dar el salto. A caballo entre Segunda B y Tercera, Moyita fue a menudo el diferente de cualquier equipo.

Ha vestido las camisetas de Villanovense, Écija, Ontinyent, Cartagena y Rayo Majadahonda (cedido por el Mallorca), Hércules, UCAM Murcia y Alcoyano (tras un fugaz paso por Bélgica). Lo que se dice un trotamundos del fútbol. En una entrevista en La Verdad, años atrás, afirmó que llegó a dudar de si se ganaría la vida con la pelota o tendría que dedicarse a varear la oliva. La insistencia culminó en premio, maximizado cuando el Castellón se cruzó en su camino.

Moyita llegó a Castalia en el verano de 2023. Tardó en debutar porque arrastraba una sanción del año anterior, pero pronto se convirtió en una pieza de peso en el engranaje colectivo. Encontró una filosofía en la que encajaba fetén. Jugó 32 partidos y marcó cinco goles, alguno tan importante para el ascenso como el que inició hace justo un año otra remontada, esta vez a domicilio contra el Intercity.

El ascenso a Segunda y la continuidad en la plantilla fue el doble botín para un futbolista curtido fuera de los focos del fútbol profesional. En el tránsito del mediapunta que fue al mediocentro que es hay algo que no se ha movido. La discreción de los que juegan y viven sin hacer ruido. En mayo del 2024, mientras todo Castellón celebraba el ascenso, Moyita se ausentó del festejo al priorizar un asunto familiar. Ahí no estaba, pero sí está cuando se le necesita.