Los 10.000 alcorinos más otros 5.000 visitantes celebraron la Fiesta del Rotllo de L´Alcora y demostraron que es sin duda la tradición más genuina de la capital de L´Alcalatén, que data del siglo XVII. La fiesta ha cambiado mucho y, aunque en su origen subían a la montaña sólo niños a pedir la lluvia y al descender de la misma recibían el rotllo, en la actualidad asciende quien lo desea hasta la ermita de San Cristóbal, y después tanto niños como niñas reciben el rotllo en la parroquia. Este protagonismo de los más pequeños es un aspecto único en toda España, según destacan los historiadores.

A las 9 horas se procedió a la salida de la Romería de Infantes desde la Plaza de la Iglesia hacia la ermita de San Cristóbal. A la llegada de la romería tuvo lugar el oficio de la misa en el ermitorio de San Cristóbal, a la que siguió el almuerzo por los pinares con la típica mona de Pascua como principal protagonista.

A la vuelta, desde la puerta del Calvario, y acompañados también por la Colla de Gigantes y Cabezudos, la romería llegó hasta el templo parroquial de la Asunción donde se procedió al reparto de los típicos y populares rotllos.

Un total de 6.500 ejemplares fueron elaborados este año entre todas las panaderías de L´Alcora. Cada año es mayor el número de niños que acuden para cumplir con el dicho de quien saque el rotllo tres años seguidos no morirá de desgracia alguna, así como el que guarde el primero de su vida. Como manda la tradición, los niños vestidos de angelitos y el último nacido de la villa recibieron dos rotllos. Hoy las fiestas de Pascua continuarán con La Dobl .