Los chiringuitos de la playa del Arenal de Burriana, que abrirán sus puertas el próximo 16 de mayo, contarán con mayor seguridad privada, además de la que ofrecerá la Policía Local y la Guardia Civil.

El alcalde de Burriana, Alfonso Ferrada, explicó ayer en la sesión plenaria que, después de lo ocurrido el verano pasado se ha acordado, junto a los empresarios de los chiringuitos, ampliar de manera importante la vigilancia privada, para lo cual se va a acotar toda la zona de párking, que también será vigilada por guardias de seguridad.

Tal y como manifestó el alcalde a la corporación municipal se han tomado todas las medidas para que la sensación de inseguridad que se produjo el pasado verano no vuelva a repetirse.

A principios de septiembre del pasado año el alcalde sugirió que se abriera un profundo debate sobre el futuro de los chiringuitos, cara a este verano. "A este precio --dijo entonces el alcalde-- más vale no montar chiringuitos".

Durante el pasado verano se produjeron diversos altercados importantes, entre ellos una carga policial en la que una minoría de jóvenes violentos llegó a lanzar piedras a las fuerzas de seguridad, y que se saldó con una persona herida. Como consecuencia de estos sucesos se montaron diversos controles policiales en los que se aprendieron varias armas blancas y objetos contundentes, como palos, porras y un bate de béisbol.