Las representaciones del belén viviente que llevan a cabo los niños y niñas de la catequesis constituyen el preludio de las fiestas navideñas en Almassora y este año celebran su 10° aniversario. La recreación del nacimiento de Jesucristo por parte de un total de 25 pequeños actores que cursan entre 4° y 6° de Primaria atrajo ayer a decenas de familiares y compañeros de clase hasta el menudo aforo del Centro Parroquial.

En 1993, la hermana del colegio de la Consolación Amparo Adell puso en marcha esta iniciativa realizando una adaptación del texto de la Biblia en varias escenas. Cabe recordar que las primeras representaciones se llevaron a cabo en la plaza de la iglesia de la Natividad hasta el 2001, cuando la lluvia y el frío obligaron a suspender una de las puestas en escena.

De modo que el año pasado se tomó la decisión de trasladarlo al teatro del Centro Parroquial y, aunque la obra ha perdido parte del encanto que tenía al aire libre, así no se tiene que depender de las inclemencias meteorológicas y los niños y familiares pueden ver cumplida su ilusión. Para ello, la madre Amparo tuvo que reducir la obra y ahora se representan nueve escenas adaptadas de las Sagradas Escrituras.

La ropa de los pequeños actores ha sido confeccionada por las abuelas o las madres, que ayer disfrutaron ilusionadas de la representación de los niños.

Los que se perdieron la representación de ayer todavía pueden disfrutar hoy de una segunda oportunidad, a las 18 horas en el Centro Parroquial.