La madrugada del 16 de agosto del 2003 una fuerte tormenta provoca el desplome parcial de la cubierta de la cúpula de la iglesia Arciprestal.

Unos días después, la Iglesia insta a empresas y particulares a afrontar el coste de la reparación.

Independientemente de la campaña que inició el colectivo vecinal de Carinyena, los responsables de la Arciprestal consiguen recaudar en pocos días unos 3.000 euros.

El Diario Oficial de la Generalitat Valenciana publica el pasado 14 de enero la adjudicación, mediante el procedimiento de urgencia, con las características del proyecto de restauración de la bóveda del mayor templo local.