El Director General de Puertos y Costas, Juan Ferrer Marsal, anunció ayer que no va a haber ningún tipo de "favoritismo" a la hora de adjudicar la gestión de la nueva marina de 311 amarres en el puerto de Burriana por espacio de 30 años. "Es un proceso perfectamente baremado y tabulado; el proyecto con más puntuación y que beneficie al conjunto de los ciudadanos será el adjudicatario", afirmó Ferrer, quien recordó que optan cinco firmas: CIES, Renos, Lubasa, Alcesa y GyC.

En cuanto a plazos, las plicas se abrirán en septiembre, se adjudicará entre octubre y noviembre y las obras comenzarían a principios del 2005. La concesión permitirá ocupar 54.310 m, con 38.456 en el agua y otros 15.854 en tierra; con 40 amarres gestionados por la Generalitat.

Respecto a la críticas de la Cofradía de Pescadores y el Club Náutico por el espacio insuficiente de 100 metros para la entrada de barcos, Ferrer dijo que la accesibilidad está garantizada: "En Altea hay 90 metros, en Calpe 80, y en el norte son incluso de 60 y 30 metros".

Respecto al Náutico, Ferrer señaló que pudo duplicar hasta 800 amarres hace dos años y no lo hizo, por lo que la Generalitat decidió aprovechar el contradique. "No obstante, podían haberse presentado como uno más al concurso para la marina", apuntó. Sobre el varadero, Ferrer dijo que se respeta la concesión por cinco años más e incluso prevén espacio para otras dos empresas. Para alargar el dique de Levante, indicó que es necesario informe favorable del Ministerio de Medio Ambiente.