El proceso de revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Peñíscola dará un paso determinante el próximo mes, cuando el consistorio reciba el proyecto elaborado por la empresa Territorio y Ciudad.

El documento aún deberá pasar por un proceso para su aprobación definitiva, puesto que habrá un periodo de dos meses de exposición pública, con el correspondiente tiempo que se deberá tomar para resolver las alegaciones. El último paso de la tramitación llegará con las determinaciones que lleguen de la administración autonómica.

El concejal de Urbanismo, Romualdo Forner, indica que el texto del renovado PGOU llegará "durante el mes de enero, puesto que en la última reunión de la comisión de seguimiento se estableció un plazo de seis meses para tenerlo hecho". Esta comisión se celebró el pasado verano, cuando la dirección territorial de Territorio y Vivienda emitió un informe sobre el documento de criterios y objetivos elaborado por encargo del Ayuntamiento de Peñíscola.

Desde el consistorio se quiere que el nuevo modelo de ordenación urbanística del municipio sea objeto de un amplio debate social. "Durante el periodo de exposición pública se escucharán los puntos de vista de particulares y asociaciones, con el fin de aprobar un documento que sea objeto de un consenso", afirma Forner. Incluso se plantea la posibilidad de que el periodo de exposición pública se amplíe, dependiendo de la respuesta de los ciudadanos.

Hasta que no haya una aprobación del nuevo PGOU, el consistorio seguirá trabajando con la ordenación vigente, que data de 1977. Para el edil "no se puede detener el crecimiento de la ciudad, aunque hay decisiones que se toman según las directrices marcadas en el documento de criterios y objetivos del PGOU". Muestra de ello es la tramitación de la ronda sur, el vial que debe conectar el casco urbano con la zona sur, y que empezó a tramitarse hace unos meses, antes de que el nuevo plan general esté preparado.