El presidente de la Junta Local Fallera Pedro Sancerni asume con firmeza que los niños no participen en las fiestas de los mayores, facilitando a los falleros una guardería donde se pueden dejar a los niños y disfrutar de la fiesta. Muestra de ello fue que el pasado sábado, cuando finalizó oficialmente la presentación de la falla de la Merced, la reina infantil abandonó la fiesta.

El cumplimiento de esta normativa no está en que la reina infantil cumpla con las exigencias del presidente Sancerni, el problema está en que hay muchas fallas que celebran las presentaciones con las falleras mayores e infantiles. Las presentaciones son un gasto importante para la comisión. Si se hacen dos proclamaciones en vez de una, el presupuesto se puede disparar para algunas fallas, aunque el presidente de la JLF asegura que subvencionaría a aquellas comisiones que celebrasen dos presentaciones.

Pero esto lleva un mayor trabajo. Los niños que asumen más protagonismo cuando la presentación es meramente infantil, posiblemente no se verían tan arropados como si esta proclamación es conjunta. Hay fallas, sobre todo las sociedades, que tienen muy asumido celebrar dos presentaciones, pero a los barrios les cuesta más dividir este acto.

La apuesta de Sancerni, que posiblemente esté bien pensada, no está obteniendo la aceptación esperada. Las comisiones, cuando más cerca está marzo, tienen más obligaciones: carrozas, comparsas y, sobre todo, las presentaciones.

Pedir que éstos realicen más trabajo y tengan la obligación de asistir el sábado a la presentación de mayores y domingo por la tarde a la de las infantiles, prácticamente todos los fines de semana hasta marzo, es pedir mucho, o por lo menos así lo entienden algunas comisiones.