El alcalde de Onda, Enrique Navarro, dio por acabado el pleno de ayer sin aprobar ningún punto, tras un enfrentamiento verbal con el portavoz del PP, Rubén Ibáñez. Cuando se votaba la urgencia del pleno, Ibáñez le recriminó al alcalde "las prisas" de la convocatoria de esta sesión para debatir las alegaciones al presupuesto. Le recordó que el plazo para presentarlas acababa el día 22.

Según Navarro, lo que le irritó fue el anuncio de Ibáñez de una nueva alegación que no entró por el registro de entrada municipal sobre el inventario de solares. Por su parte, Ibáñez señaló que al suspender el pleno, "de forma indirecta", se les daba la razón a ellos, ya que no se cumplían los plazos.