El puente de la avenida Papa Luna a la altura del Barranquet, en Benicarló, pasará a la historia la semana que viene, según anunció el alcalde de la ciudad, Enric Escuder. "Se está pendiente de culminar la pasarela peatonal, para que después se suprima el puente, y se pongan en marcha las zapatas que sirvan de anclaje para el nuevo paso", dijo. El alcalde se reunió con el director de la obra, Eduardo Muñoz, después de que el equipo de gobierno manifestara su inquietud sobre lo que creían un lento ritmo de las obras, de las que se hace cargo la Conselleria de Infraestructuras.

Tras la desaparición del actual paso, se instalará un nuevo puente, de tipo metálico, y cuyas piezas ya están casi finalizadas. "Se vaciarán los laterales, y se harán las zapatas de hormigón, con más de mil metros cúbicos cada una, que sustentarán su estructura". Con esta actuación se prevé acabar con los problemas de inundaciones en la zona. Las obras tienen una duración prevista de ocho meses.

Por otro lado, el alcalde anunció la inminente firma de un convenio con la empresa IFF, que evitará nuevos vertidos procedentes de la fábrica hacia la red de alcantarillado. "Ahora se canalizarán por el colector del polígono industrial, siguiendo todos la normativa", manifestó.

REVISIÓN DEL PGOU El proceso de renovación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) ha llegado a una nueva fase, después de que el alcalde convocara a los representantes de las principales asociaciones de vecinos.

Escuder les explicó sus propuestas de "consensuar qué infraestructuras son necesarias para el desarrollo de determinadas zonas y que se deben pedir a las administraciones superiores". El presidente de los vecinos de la costa norte, Manuel Roca, mostró su satisfacción "por el hecho de que nos hayan convocado después de un año y pico del actual gobierno".