Un año después de que el Ayuntamiento de Almassora hiciera efectiva la restricción de unos 25 accesos al río Millars, para evitar la entrada de vehículos y acabar con los vertederos incontrolados en este paraje natural, no se ha evitado que las basuras se vuelvan a acumular en el interior del cauce, como constató ayer Mediterráneo.
Esta situación la denunció también el concejal del Bloc en Almassora, Xavier Trenco. Así, el edil nacionalista criticó ayer que el río vuelve a estar desprotegido. "Ha habido una relajación por parte de los Ayuntamientos, Conselleria y la Confederación Hidrográfica del Júcar
(CHJ)", declaró Trenco.
Cabe recordar que las limitaciones de acceso eran de dos tipos: las fijas, con la construcción de un talud de tierra; y las móviles, en las que se puso un pilón extraíble y cadenas. Una actuación que costó 30.000 euros.
Al respecto, Trenco constató que, tras la apertura del camí Vora Riu el pasado mes de julio, para permitir el paso de los camiones de las obras de regeneración, el vial no se ha vuelto a cerrar, "de modo que se han repetido otra vez los vertidos en la zona, que han dejado el cauce lleno de basura", comentó.
De igual manera, aseguró que se han arrancado los hierros en las barreras del Marjalet y en otros puntos del río, "que al menos tenían algún efecto, pero ahora se ve que esta inversión no ha servido de nada", dijo.
