Las autoridades locales inauguraron ayer el ecoparque de la capital de l´Alcalatén, estando también presentes Vicente Colás, jefe de producción, y Gerardo Branchadell, jefe de servicios de la delegación de Levante y Medio Ambiente de la empresa FCC.
En estas instalaciones de recogida selectiva --que fueron una promesa electoral del 2003 del grupo socialista, aunque se retrasaron por el hallazgo de restos arqueológicos--, podrán depositarse diversos materiales voluminosos, como plásticos, electrodomésticos, vidrios, papel y cartón, madera, muebles, metales y restos de los derribos.
En lo que se refiere a materiales tóxicos de menor tamaño, también dispondrá de contenedores para baterías, aceite usado, medicinas, pilas, radiografías y fluorescentes, entre otros.
Además, también contará con un aula medioambiental, a disposición de cualquier colectivo.
Este punto limpio gestionará la recogida de unos residuos sólidos urbanos, pero de carácter específico, para luego separarlos y seleccionarlos, con el fin de poder reciclar los materiales y/o compostar la materia orgánica.
Como apuntaron los responsables de la Oficina Municipal de Medio Ambiente, "al contrario de lo que muchos creen, los ciudadanos corrientes, en nuestra vida cotidiana, también desechamos residuos peligrosos, como las pilas, las radiografías o los tubos fluorescentes".
Por otra parte, el Partido Popular local remitió una nota lamentándose de no haber sido invitados a la inauguración.
