El PAI Torrent volvió a quedar ayer sobre la mesa en el pleno extraordinario convocado en Nules precisamente para dar una salida definitiva al recurso de reposición presentado por la empresa. A propuesta de IPN y con el apoyo de todos los grupos políticos, excepto el equipo de gobierno, que se abstuvo, el pleno acordó posponer la votación con el objetivo de modificar el PAI para lograr "una solución satisfactoria para todos", que, a tenor de lo expuesto, pasaría por garantizar que en la zona no se va a instalar en el futuro ningún tipo de industria pesada.

El proyecto ni siquiera pudo llegar a debatirse. Antes de comenzar la sesión, IPN presentó un escrito en el que solicitaba retirar el único punto del orden del día e incluir modificaciones al PAI, para "definir bien el tipo de empresa o establecimiento que se pueda ubicar en la zona", con el objetivo de que "no sean nocivas peligrosas ni ruidosas". Unas apreciaciones que sorprendieron al portavoz del PP, Ramón Arenós, quien pidió explicaciones al representante de IPN, Vicente Martínez Lucas, por "haber aprobado en enero el PAI sin informes y ahora decir que es precipitado".

PROCESO El programa urbanístico del Torrent llegó por primera vez al pleno en enero. En aquel momento, tan solo recibió el apoyo de los independientes. En cuanto a su inclusión en el debate a principios de año --"sin informes técnicos"--, el alcalde, Salvador Górriz, explicó: "Los aspirantes a urbanizadores me pidieron que entrara a pleno y no tuve ningún inconveniente". De hecho, en aquellos inicios de año fue habitual, tal como recogió Mediterráneo, que los municipios acelerasen la tramitación de proyectos urbanísticos, ante la entrada en vigor de la LUV.

En cualquier caso, Górriz recordó que en aquel primer pleno, el equipo de gobierno tampoco aprobó el PAI, ante la falta de informes técnicos. En la misma línea, el alcalde dejó claro que el ejecutivo municipal "no aprobará un PAI industrial". "Solo admitiré industria pequeña de uso restringido", dijo.

Una postura similar defendió el portavoz de EU, Sixto Salvador, cuando denunció que "la industria hipoteca el PAI". Sin embargo, el edil fue más allá y alertó de que "si impedimos que vaya industria pesada, quedará mucho espacio para pequeñas empresas" y se preguntó si "cuando queden vacíos los terrenos, ¿dejaremos que vaya la industria pesada?". "Exigimos concreción a la empresa", añadió el concejal del Bloc, Francesc Miquel Fernández, quien reiteró la demanda de informes que "aporten seguridad jurídica".

En cualquier caso, Fernández recordó que la zona afectada "es una área degradada y alguna solución hay que darle", aunque siempre, según el nacionalista, "teniendo en cuenta la sensibilidad vecinal". En este mismo sentido se expresó el concejal del PSOE, Vicent Roselló, quien también pidió una mayor claridad en los informes técnicos antes de proceder a la votación.

Por su parte, Vicente Martínez Lucas, en nombre de IPN, defendió que "Nules necesita suelo terciario para que se instalen pequeñas empresas, que ahora tienen que irse a crear riqueza a otros pueblos vecinos". Sin embargo, fueron precisamente los independientes los que promovieron la retirada del punto del orden del día, a través de un escrito en el que también solicitaron "una reunión urgente con los vecinos", así como que el proyecto incluya "una zona perimetral para pasear o correr".

RESOLUCIÓN En cuanto a la próxima resolución del recurso de reposición y, por tanto, la aprobación o no del PAI Torrent, al finalizar el pleno el alcalde propuso fijar un plazo máximo de un mes para llegar a un acuerdo definitivo, aunque la oposición rechazó la posibilidad, que no llegó a ser acordada. A partir de ahora, pues, deberá ser la comisión de urbanismo la que defina las propuestas de los grupos políticos y reciba los requeridos informes para poder dar salida a la urbanización de más de 800.000 metros cuadrados.

Por el momento, el Ayuntamiento ha recibido ya los planos modificados del PAI Torrent, en el que la zona reservada a viviendas en el proyecto original ha sido sustituida por dos áreas verdes y los terrenos industriales --"solo para pequeñas empresas", según los promotores-- quedan junto a la carretera N-340.