El martes, 23 de enero, se cumplirá un año de la adjudicación provisional del PAI Pedrera Port a Corporación Inmobiliaria Albia SA. La mercantil llegó al escenario urbanístico de Burriana en julio de 2005, al presentar su proyecto su propietario, Carlos Esteve, con una trayectoria de más de tres décadas. Tras crear su primera empresa a los 17 años, actualmente lidera un grupo empresarial nacional e internacional. Solo Albia tiene un capital social de 20 millones de euros.

Esteve considera Burriana "una ciudad privilegiada de la Comunitat, situada estratégicamente entre Valencia y Castellón, a pocos minutos del futuro aeropuerto, con siete kilómetros de playa prácticamente virgen, un puerto con futuro y una ronda para dar paso a nuevos accesos". De ahí su decisión de invertir, no solo en Pedrera-Port, sino en Sant Gregori o Jardines de la Malvarrosa, entre otros. "Hemos hecho una apuesta arriesgada, eso sí, pero ilusionante por Burriana", indica Esteve.

Acerca de Pedrera Port, lo describe como un PAI innovador en cuanto a tipo de vivienda y precio, "puesto que serán apartamentos y no unifamiliares o adosados de lujo; es un modelo residencial diferente al planteado hasta ahora en esta ciudad", apunta.

El PAI, de 725.000 m, se estructura en manzanas grandes con edificación en altura y zonas comunes amplias, verdes y deportivas. "Es una ciudad jardín donde la calidad de vida está garantizada, a precios asequibles y competitivos; un modelo muy consolidado en América, y ahora también en España", destaca.

El índice de viviendas por hectárea es de 75 y la ocupación de suelo, del 10%. "Para que sea tan baja debe ser edificabilidad en altura, como indica la nueva Ley del Suelo del Gobierno español", dice.

En cuanto a la legalidad, Esteve resalta que el PAI "cumple estrictamente con la ley, muestra de ello es que no se han presentado recursos". Y añade: "No afecta al suelo de dominio público de Costas y se crea un jardín de 85.000 m para proteger el humedal y evitar alteraciones del nivel freático".

En cuanto a la relación de la urbanizadora con los vecinos y la asociación de propietarios de terrenos Asnade, el empresario define la actual situación de "apoyo total y transparencia".

Recuerda que desde octubre está abierta la oficina de atención al propietario en la avenida Mediterráneo. "Algunos están haciendo una agrupación y nosotros los apoyaremos en todo", indica. En cuanto a Asnade, recuerda que se han reunido en cinco ocasiones y están estudiando la viabilidad de la propuesta, dentro de la ley. "Seguro que llegaremos a un acuerdo con ellos", sostiene.

Por otro lado, acerca de la vinculación con Gruines, esta firma adquirió Corporación Inmobiliaria Albia SA el 28 de enero de 2005, prácticamente un año antes de su adjudicación provisional. "La documentación es pública; ni entendí entonces, ni entiendo ahora dónde está la polémica; a la hora de gestionar una empresa se delega según la actividad propia de la misma, y en aquel momento se encargaba Javier Divar", comenta. Sostiene que "los rumores son infundados y las especulaciones, de mala fe; ni ha existido ni existe ningún vínculo con el alcalde, Alfonso Ferrada; la recusación de un empresario a Ferrada fue un tema político y, como empresa, estamos fuera de la política". Del artículo del diario vasco Deia, indica que han presentado una demanda civil. "Lucharemos porque el PAI --pendiente de la aprobación del concierto previo del PGOU--, prospere, pero la última palabra la tendrá el pueblo, independientemente de quien lo haya redactado o presentado. Saldrá adelante, pues es un buen proyecto, y todos lo saben", resalta.