El Ministerio de Cultura no asume los siete trabajadores contratados por la Diputación de Castellón en el tiempo en que ha tenido la concesión del castillo y murallas de Morella. Ayer se firmó el acta de recepción, que devuelve la titularidad a la Administración central del Estado.

La rúbrica del documento se realizó ayer en la Subdelegación del Gobierno. El diputado Miguel Ángel Mulet hizo constar la necesidad de que el Ministerio integre a los trabajadores y se basa en el Estatuto de los Trabajadores. Según explicó, "la Diputación va a seguir manteniendo el personal hasta que se resuelva su situación y nos reservamos la posibilidad de reclamar en un futuro por este gasto".

Sin embargo, el Ministerio de Cultura, a través de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales, fue tajante. En un comunicado, manifestó que la orden del 30 de marzo del 2001 por la que otorgó a la Diputación la concesión administrativa de uso del inmueble "establecía el sometimiento expreso por ambas partes a las estipulaciones contenidas en el pliego de condiciones que acompañaba a dicha orden". La cláusula en la que se habla de la finalización de la concesión establece que "la Administración del Estado no asumirá, en ningún caso, los contratos de trabajo que pudiera haber concertado la Diputación para el cumplimiento de sus fines", por lo que el Ministerio considera que "no puede entenderse que la reversión implica la sustitución de empresa prevista en la legislación laboral vigente".