Las dos personas cuyos cadáveres fueron encontrados esta tarde en una casa de Benicarló fallecieron por inhalación de gases tóxicos por una mala combustión de una estufa de leña, según informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno. Aunque en un principio se informó de que la casa donde se encontraron los cadáveres pertenecía al término de Cálig, se ha precisado ahora que está ubicada en el límite del término municipal de Benicarló. Los fallecidos son un matrimonio que solía pasar los fines de semana en esta casa de campo, donde esta tarde fueron localizados los cadáveres. Al parecer, fue una vecina de una casa próxima la que dio el aviso a la Guardia Civil, que encontró los cuerpos sin vida de estas dos personas, junto a los cadáveres de algunos animales domésticos. Fuentes de la Guardia Civil han informado de que los cadáveres no presentaban, en principio, signos de violencia, por lo que las primeras hipótesis apuntan a la inhalación de gases tóxicos por una mala combustión de la calefacción.