El parque eólico marino de Vinaròs está en el punto de mira de varias empresas, que optan a conseguir la ejecución de la obra en aguas vinarocenses. Así, según fuentes consultadas por Mediterráneo, son al menos cinco las compañías que han comunicado al Ministerio de Industria su interés por el proyecto.

La empresa que ha dado el primer paso ha sido Iberdrola, que ha elaborado seis proyectos eólicos marinos en la costa española, dos de los cuales se situarían en aguas castellonenses, con el nombre Punta de las Salinas y Costa de Azahar. Las instalaciones se pondrían en marcha entre 2011 y 2015, ya que no están incluidas en el Plan Estratégico de Iberdrola Renovables que desarrollará del 2008 al 2010, y se sumarán a la cartera de proyectos de 42.000 megavatios que la hidroeléctrica ya posee ahora.

Al respecto, desde el Ayuntamiento de Vinaròs, el alcalde de la ciudad, Jordi Romeu, afirmó "no tener ninguna constancia de todos estos movimientos".

RECHAZO GENERAL. La posible construcción del parque eólico despertó desde un principio el rechazo entre la población vinarocense, por su posible impacto visual y medioambiental. Así, desde que la empresa Capital Energy propusiera la iniciativa hace ahora tres años, han sido multitud las movilizaciones convocadas en la población vinarocense contra su construcción.

La protesta paralizó las gestiones, aunque ahora vuelven a renacer. Con la nueva normativa de los parques eólicos, aprobada el 2007, los promotores deben presentar una solicitud de reserva de zona ante el Ministerio de Industria acompañada de una memoria que incluya la superficie afectada, además de un anteproyecto de la instalación.