El alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, reclamó ayer a la oposición que "no caiga en la crítica fácil", respecto al incremento del IBI y algunas tasas, y pide un debate "serio" de los presupuestos del 2009.

Calpe reconoce que "como político sé que no hay nada más impopular que anunciar una subida de impuestos, aunque sea muy relativa, o introducir una nueva tasa".

Respecto a la subida de un 5% prevista para el IBI, el primer edil explicó que "partimos de unos valores catastrales absolutamente desfasados que vienen de 1995, cuyo incremento anual está muy por debajo de lo que sube el IPC y, por tanto, si siguiéramos con el tipo fijo, cada vez estaríamos recaudando menos, cuando al Ayuntamiento, cada año, la plantilla de personal le cuesta más dinero,al igual que los servicios que presta. Hay que ajustar todo eso, y lo responsable es hacerlo, al menos si queremos que las cosas sean viables".

Además, el alcalde insiste en que si no se aplicara un incremento del IBI, las arcas municipales dejarían de ingresar medio millón de euros a lo largo del próximo año.