En principio, la declaración de los 40 agentes de la Policía Local de Burriana llamados a testificar se había dispuesto de forma gradual. Sin embargo, el retraso acumulado originó que a mediodía hubiera 25 policías esperando para poder testificar. Los primeros en hacerlo fueron los dos inspectores, de los tres que tiene la plantilla, quienes tras superar el trámite fueron imputados, por lo que volverán a ser interrogados pero con asistencia jurídica. Tras salir a la sala donde estaban el resto de compañeros, y tras anunciarles que habían sido imputados, la noticia provocó gran desazón, ya que son personas con una dilatada trayectoria en el cuerpo.