La empresa Escal UGS, encargada de la instalación de una planta terrestre para extracción de gas, conocida como proyecto Castor, se ha reunido con varios colectivos de la localidad, entre los que destacan la asociación de vecinos Migjorn, la plataforma Salvem el Port, el responsable del Club Náutico, y el paleontólogo David Gómez, entre otros, para garantizarles que las instalaciones no tendrán impacto visual.
Y es que la Plataforma Ciutadana de Defensa de les Terres del Sénia había centrado su preocupación en más de una ocasión, alertando sobre las posibles consecuencias que podrían tener estas instalaciones para la ciudad.
Tras el encuentro, los representantes de las entidades vecinales han manifestado su conformidad con los datos aportados por la empresa, afirmando que "no existe ningún daño posible, ya que está todo completamente rodeado de vegetación". "Además, la chimenea, que tiene 28 metros de altura, solamente entraría en funcionamiento en caso de emergencia", comentan.
En el encuentro también se ha confirmado que los pocos vestigios de patrimonio histórico que aún se conservan no se verán afectados por la instalación de la planta terrestre en el Mas del Pi.
La firma ha refrendado que esta tendrá 27 hectáreas y estará circunscrita por árboles, "por lo que quedará cubierta del todo".
La plataforma marítima, en cambio, estará instalada a 21,6 kilómetros de la tierra y se usará tan solo durante los meses de invierno, para la extracción de gas.
Aun así, continúa habiendo división de opiniones respecto a la aprobación del proyecto Castor, ya que, "por un lado, hay ciudadanos que dan su apoyo al plan y, por el otro. existe alguna reticencia prácticamente desde el inicio del mismo", afirman.
No obstante, aseguran que "hay más gente a favor que en contra". La mayoría de miembros de los colectivos entrevistados opina que el proyecto avalado "resultará muy beneficioso para nuestro municipio".
