Alcossebre retorna a la época del medievo con la organización del tradicional Mercado Medieval, a lo largo del fin de semana.

El concejal de Actividades y Mercados, Ricardo Llorens, ha señalado que “este año es el cuarto en que se celebra esta actividad y está siendo todo un éxito, porque ha tenido una muy buena acogida de vecinos y turistas”.

Además, Llorens ha destacado que “la muestra está destinada especialmente para los visitantes que pasan el verano en el municipio”, ya que, mediante esta opción, tienen la oportunidad de conocer costumbres ya desaparecidas como la música, oficios y manjares de la época.

La calle Irta alberga todos los puestos de esta exhibición de la cultura y las artes del medievo. Durante el recorrido se puede disfrutar de puestos artesanos, con productos naturales elaborados con el certificado de artesanía de la localidad y degustar la gastronomía de la ciudad.

De igual forma, también se pueden ver demostraciones de oficios como el cincelado de peinetas y los embogadores, que son los artesanos que arreglan las antiguas sillas de boga.

Además, se han instalado numerosas atracciones para los más pequeños como un circo, paseos en burro, tiovivos y norias que se mueven con las manos y los pies, como se hacía en la edad media, cuando no existían los avances tecnológicos.

Las personas que se acerquen al Mercado Medieval también tendrán a su alcance actuaciones de danza del vientre y el espectáculo de una mujer faquir que realiza ejercicios sobre una cama de clavos y sorprendentes cremaciones con antorchas.

El mercadillo permanecerá abierto hasta mañana por la tarde, cuando cerrará sus puertas con un número muy alto de asistentes. Y es que son muchos los que ya han acudido a conocer las propuestas que se les ofrecen, además de pasar un buen rato con los más cercanos.

Con esta iniciativa, Alcossebre se consolida como un destino de turismo para las familias. H