El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino tenía previsto invertir más de 54 millones de euros en la provincia durante este año, pero las perspectivas no son nada halagüeñas. Los proyectos están en mitad de una larga tramitación, lo que su resolución para este ejercicio se vislumbra más bien improbable.

Las obras se centran en la regeneración del litoral, una de las reclamaciones de los municipios con problemas de erosión y, entre ellas no se encuentran algunos de los casos más problemáticos, como la costa norte de Benicarló o la playa de Nules. En todo caso, todavía está pendiente de presentarse el estudio de la Universidad de Cantabria que permitiría saber en qué estado se encuentra el frente litoral entre Burriana y Sagunto y aplicar una solución definitiva, aunque dejaría fuera del mapa a la zona norte.

La única intervención que se está realizando es la adecuación del entorno de la playa de Sant Vicent, donde se ubicará una plaza dunar con módulos desmontables para ocio o comercio. También se prevé la creación de una pasarela que discurrirá paralela junto al barranco de Farja.

LÍMITE LITORAL La semana pasada se supo que Nules alegaría contra el plan de regeneración de la costa sur de Burriana, aunque matizando que no se oponía a este, sino a las afecciones que se pudieran ocasionar. El alcalde burrianense, José Ramón Calpe, dudó de que el programa se fuera realmente a ejecutar, mientras que el concejal socialista Vicent Aparisi criticó la actitud "apática" del primer edil por no "confiar en un proyecto que sí ve claro su homólogo en Nules".

Mientras, los municipios viven con temor la llegada de los temporales, ya que las tempestades hacen desaparecer las playas y afectan a las viviendas, provocando numerosos daños.