Los vecinos de la Vall d´Uixó deberán esperar hasta agosto para poder bañarse en la piscina de verano ubicada en el paraje de San José. La concejala de Emsevall, Elena Vicente-Ruiz, indicó que la instalación acuática "abrirá solo en agosto, el mes en que está cerrada la piscina cubierta".

El objetivo, según la edila, es "no generar más gastos de los que son necesarios". Este será el primer verano que los valleros solo podrán disfrutar un mes de la instalación estival. "Tenemos que ser austeros porque la situación económica así lo requiere y hemos decidido que las personas que van a hacer deporte puedan seguir en la infraestructura climatizada en julio y, cuando esta cierre, abriremos la otra", dijo. Se trata, según Vicente-Ruiz, de la política de contención que se ha marcado el nuevo equipo de gobierno. No obstante, "no escatimaremos en el cuidado del enclave", indicó, y añadió que "seguiremos mejorando y promocionando nuestra joya de la corona, que es este maravilloso río subterráneo y su entorno".

En este sentido, aseguró que "cuidaremos las grutas para captar a nuevos turistas". Para Vicente-Ruiz, la Vall se ha convertido en un "referente turístico gracias a la labor del gerente del enclave, Javier Paulo, y a su antecesora en el cargo, Esperanza Nebot". Por otra parte, dio a conocer las actividades que se pondrán en marcha en el área a partir de la próxima semana. Para la regidora, los eventos continúan con paso firme porque "han tenido siempre un éxito innegable".

BAILES ESTIVALES A partir del sábado, 25 de junio, comenzarán los bailes de verano, que se impartirán los lunes, viernes y sábados hasta el día 3 de septiembre. Vicente-Ruiz destacó la aceptación ha tenido esta iniciativa en años anteriores y aseguró que seguirán llevándose a cabo todo tipo de actos en un "entorno magnífico y significativo para la Vall".

Aunque no todas las propuestas serán nocturnas, sino que también se incorporarán diurnas y gratuitas, como es el caso de las clases de batuka, los lunes y miércoles de julio y agosto, a las 9.30 horas. El enclave es un punto privilegiado en el que los valleros huyen de las sofocantes temperaturas y pasan una buena jornada rodeados de naturaleza. Cada vez más vecinos se rinden al encanto de este paraje municipal.