Burriana viene reduciendo los gastos corrientes del Ayuntamiento desde el año 2009, lo que supone que el consistorio se ahorra 2.646.000 euros en la prestación de los mismos servicios. Esta rebaja se viene consiguiendo mediante la renegociación de diferentes contratos, como el de suministro de la luz, la telefonía, la limpieza viaria o la jardinería, entre otros. A ello, hay que añadir una disminución del 33% de las subvenciones o una reducción progresiva del coste del capítulo 1 del presupuesto destinado a personal.

Según el edil de Hacienda, Juan Fuster, el plan de ajuste les ha dado la razón. El recorte de 2,6 millones de euros “es trabajo que el consistorio ya tiene avanzado y que no ha sido preciso llevar a cabo ahora con más medidas”, aseguró el concejal del área. En el mismo sentido se expresó el alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, quien dijo que el plan de ajuste del Ayuntamiento “tiene menos medidas de las que cabría esperar o de las que tomarán otros”.