El PP de Burriana sacó adelante en el plano de ayer por la mañana el plan de ajuste que pedía el Ministerio de Fomento para concender el préstamo con el que se liquidarán las deudas a los proveedores de la administración local hasta el 31 de diciembre del 2011. El PSOE votó en contra y Cibur se abstuvo.

El concejal de Hacienda, Juan Fuster, destacó que, de los cuatro millones de euros que solicita el Ayuntamiento, 2,35 millones serán para pagar facturas correctamente tramitadas y con consignación presupuestaria, pero que no se han abonado dentro del plazo de 50 días que marca la legislación y de ahí que se hayan tenido que incluir en esta operación económica.

“El montante que se solicita y que está reflejado en las cuentas municipales se contabilizará como remanentes de tesorería”, detalló Fuster, quien añadió que “el Consell adeuda 1,6 millones de euros”. No obstante, el edil aseguró que este mismo año se generará un ahorro de 1,2 millones de euros “sin tomar medidas drásticas”. Fuster reconoció que ha habido gastos que han superado las partidas, pero lo justificó aludiendo “a la reducción de los ingresos”. H