En la provincia de Castellón se han localizado numerosos artefactos de la guerra civil como el de ayer. En 1995, en Vila-real se encontraron dos proyectiles incrustados en la fachada de la Arciprestal, en el centro de la ciudad, lo que se repitió en 2007, cuando alguien dejó un obús junto a unas villas.

En 2004 un maquinista de una excavadora halló una bomba durante los trabajos de construcción del Residencial Benicàssim Playa Golf. Junto a un grupo de albañiles procedió a desenterrarlo, comprobando que se trataba de una bomba. Inmediatamente se dio el aviso.

Por otra parte, en agosto del 2010, especialistas de la Guardia Civil se hicieron cargo de otro explosivo sin estallar, en el marco de las excavaciones que una empresa realizaba en la Casona del Amudín de Segorbe.

En septiembre del 2010, la constructora encargada del túnel del paseo marítimo de Vinaròs también encontró otro obús en la confluencia del paseo Colón con la avenida Jaime I. H