Miles de personas cruzaron este fin de semana el pórtico amurallado del casco antiguo de Almassora, con motivo de la Fira de Sant Andreu. “Más que nunca”, incidió la concejala de Cultura, Nuria Felip, quien confirmó ayer tarde un récord de visitas en la 12ª edición del certamen, tras su recuperación.

A falta de contar con datos concretos, lo que es seguro es que la cifra de 10.000 personas del año pasado fue superada con creces. “Desde la apertura de la feria el sábado la afluencia de personas no cesó por las calles de la Vila hasta el cierre la tarde del domingo”, expresó la concejala, que manifestó estar “muy contenta” con el resultado de la feria.

La satisfacción fue también la tónica entre los más de 60 expositores que participaron. “Los comerciantes han manifestado un aumento de las ventas respecto al año pasado, en el que sí notaron la crisis”, incidió Felip, quien destacó los resultados de la segunda Fira del Vi, celebrada el sábado en los bajos del Museu Municipal y que multiplicó por cuatro las visitas de la primera edición.

Actividades // Tras la exitosa jornada inaugural del sábado, en la que cabe destacar el desfile nocturno, ayer domingo, los más de 60 puestos de venta abrieron sus puertas a las 11.00 horas. La primera actividad llegó solo 30 minutos después con una partida de pilota en la calle Sant Cristòfol. Mientras tanto, los personajes del bufón Jano, Xacote y el Noble Pobre visitaron el recinto, al tiempo que sonaban danzas orientales.

Las exhibiciones de cetrería volvieron a congregar a decenas de vecinos. Como novedad, se instalaron en la plaza de la Iglesia, por donde también pasearon el fraile, la curandera o el contrafet, ofreciendo animación al público asistente. Un espectáculo de fuego clausuró la Fira de Sant Andreu del 2012, marcada por la afluencia de gente y las ventas, “que hoy continúa como muestra viva de aquellos mercados medievales que en Almassora adquirieron gran importancia”. H