El pleno de Benicàssim aprobó ayer la nueva ordenanza de ocupación de vía pública (con los votos a favor del PP y del Bloc y la abstención del PSPV y EU), que regulará la estética de estos espacios. Los dueños de los establecimientos tendrán un periodo de cuatro años para amoldarse a las condiciones de la norma, que “se ha elaborado con el consenso de los empresarios”, indicó la edila San Miguel, y los nuevos deberán ya instalar sus terrazas con las características establecidas.

La eliminación de publicidad, la utilización de material de calidad en el mobiliario, la unificación de los colores en toldos y sombrillas, la incorporación del logo de Benicàssim o el horario de montaje son solo algunos de los cerca de 30 artículos que incluye el reglamento que se ha trabajado durante el último año.

En la sesión también quedó patente que la localidad sigue sin querer festivales en agosto y negociará con los organizadores de los macroeventos, aunque ya cara a las ediciones del 2014. El equipo de gobierno dejó clara su intención de sacar el Rototom del mes turístico más potente y trasladarlo a julio. Por lo que se reunirá con Maraworld (FIB y Costa de Fuego) y la Asociación Exodus (Rototom). Aunque la tarea más difícil será que esté de acuerdo el más veterano (el FIB) y deje hueco a la cita reggae.

Asimismo, se avaló el canon de Reciplasa, destinando 1,1 millones de euros y en los que se incluye la inversión para transformar residuos en combustible. H