El Síndic de Comptes, Rafael Vicente Queralt, hizo ayer público el Informe de la Cuenta General de las Entidades Locales del 2011. De este se desprende que Orpesa es un “ejemplo” de buenas prácticas en la gestión local, ya que “no tiene facturas en el cajón ni deuda alguna ni remanente negativo”. Y es que el Síndic aseguró que la situación de las administraciones locales es “preocupante” porque hay “albaranes pendientes”.

En este sentido, en el lado opuesto a Orpesa se encuentra Navajas, que destaca por los números negativos que presenta.

El Síndic explicó que como consecuencia de las limitaciones en los ingresos, “ha habido gastos que han tenido consignación presupuestaria necesaria y después ha habido que pagarlos”. “Eso son los reconocimientos extrajudiciales o las obligaciones no reconocidas que se encuentran aún en muchos consistorios”, indicó.

Para Queralt, “esto no debería ocurrir, ya que cualquier deuda no admitida debe incluirse en el presupuesto, aunque no tenga consignación, porque, de lo contrario, se están desvirtuando las cuentas públicas”. El estudio ha chequeado el estado de 512 municipios de la Comunitat Valenciana, lo que supone el 95% del total. El análisis concluye que la necesidad de financiación se situó en 85,5 millones y que el remanente ha descendido. H