Los alumnos de las cuatro aulas de Primaria del colegio Lope de Vega afectadas por la sustitución de la cubierta volvieron ayer a sus clases, tal y como anunció en su día el alcalde, Mario García, cuando señaló que el traslado provisional, como consecuencia del retraso de las obras por la lluvia, tendría una duración máxima de dos semanas, hasta que los trabajos estuvieran completamente finalizados, las clases limpias y preparadas para acoger a los alumnos con total normalidad.

15 días antes del inicio del curso, la directora territorial de Educación, María Esteve, acompañada por el alcalde y los técnicos responsables del proyecto de sustitución del techo se reunieron en el centro para analizar cuáles podían ser las consecuencias del episodio de precipitaciones que se estaba produciendo en el área.

En ese momento ya se anunció que de persistir las lluvias, la actuación que se estaba desarrollando en los plazos previstos, podría sufrir un ligero retraso, un extremo que se cumplió tras la tromba de agua caída un día después. Esteve visitó las instalaciones de la Escuela Taller, donde comprobó que se reunían las condiciones indispensables para albergar las cuatro aulas que se habían visto afectadas. También se comprometió a asumir, el coste del traslado de los alumnos hasta esta sede provisional. H