La primera edila de Benicàssim, Susana Marqués, califica de “pataleta” la denuncia del concejal del Bloc Domingo Ferrando, en referencia a la situación de la disolución de la Sociedad de Desarrollo Turístico de Benicàsim (DTB). Marqués, que ayer declaró como imputada en el Juzgado de Instrucción número 2 de Castellón por esta causa, manifestó que “resulta curioso que, tras las elecciones, a los pocos días de ser alcaldesa, el propio edil nacionalista pidiera insistentemente un puesto en el equipo de gobierno, solicitud que no aceptamos por respeto a nuestros votantes”. “A partir de ahí, el Bloc optó por esta reiterada forma de poner denuncias en los juzgados como pataleta”, añadió. La munícipe asegura que “este tipo de actitudes no variarán la hoja de ruta marcada por el Partido Popular de Benicàssim”.

130.000 EUROS // Marqués estuvo durante 20 minutos ante el juez y relató que, cuando accedió a la alcaldía, se encontró “con un agujero de 130.000 euros de endeudamiento en la DTB que se generó bajo el gobierno que formaban Bloc-EU-PSOE, tripartito del que Ferrando era teniente de alcalde”. “Resulta particularmente extraño que cuando este concejal formaba parte del equipo de gobierno permaneciese callado y no tomara acciones para evitar esa gran deuda”, añadió.

“He declarado desde la tranquilidad que me otorga el hecho de que siempre hemos actuado sin mala fe, no queremos responder de una deuda que es anterior”, matizó la alcaldesa, que acudió al juzgado junto a la concejala de Turismo, Elena Llobell, quien también prestó declaración.

Por su parte, Ferrando manifestó que “Compromís se vio en la necesidad de llevar a la Fiscalía al equipo de gobierno, ante la soberbia y prepotencia de su primera edila. Desde el primer momento, tanto la alcaldía como el secretario fueron advertidos de que el procedimiento para cerrar las cuentas de la DTB no era correcto y no podía ir a cargo del erario público la liquidación en negativo de una sociedad pública-privada”. “El juez decidirá si hay irregularidades o no”, añadió. H