Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Almassora, PSOE y Bloc-Compromís, se han mostrado en contra del derribo del edificio público de la plaza Botànic Calduch, opción que actualmente estudia el equipo de gobierno a petición de un grupo de vecinos de la zona, según informaron fuentes municipales.

La alternativa para ambas formaciones pasa por darle un uso alternativo al local -que hace años albergó un bar-- que dé solución a la problemática vecinal sin tener que llegar a su demolición.

El portavoz del Partido Socialista, Santiago Agustí, recordó que hace un año ya presentaron una moción en este sentido, ante la degradación que presenta el inmueble y que, en su opinión, “es responsabilidad del equipo de gobierno”. “Sabemos que los vecinos están preocupados por ser un foco de problemas, pero el derribo nunca es una solución”.

En la misma línea se manifestó el líder del Bloc-Compromís, Xavier Trenco: “Hay miles de soluciones, menos tirarlo”. Entre las posibilidades, Trenco apuntó a convertir este espacio en un local social. En su día, desde el PSOE también abogaron por adecuarlo como biblioteca de barrio.

El proyecto realizado por los técnicos municipales para evaluar los costes que supondría sacar de nuevo en concesión el servicio se eleva a 120.000 euros. H