La responsable de la administración de lotería de Peñíscola, Marián Rovira, estaba ayer como subida en una nube. “Me han llamado a las ocho de la mañana para comunicarme que hemos repartido un boleto de seis aciertos en la Bonoloto del viernes, y todavía estoy temblando”, explicaba con claros signos de emoción.

El acertante, el único de primera categoría de ese día, dice adiós definitivamente a la crisis con el premio que le ha correspondido de 1.720.993,05 euros. “Te puedes imaginar la alegría que tenemos”, añadía la lotera peñiscolana, mientras recibía los primeros comentarios de los vecinos, a medio camino entre las felicitaciones y la curiosidad por saber quién es el afortunado.

Marián Rovira asegura que no conoce la identidad del ganador de tan buen pellizco, “aunque por la época del año en la que estamos, en la que hay una escasa presencia de turistas, pensamos que podría ser del pueblo”. Aún así, nadie se había puesto en contacto con la administración, ni cree que lo haga para reclamar el premio “puesto que con esta cantidad de dinero, se acude directamente al banco para que gestionen el cobro de un importe, en este caso, bastante considerable”.

UBICACIÓN // El punto de venta de lotería, situado en la calle Virgen de la Ermitana, lucía ayer el cartel que daba cuenta de la fortuna repartida. El letrero pasará a formar parte de la pared en la que se recuerdan otros suculentos premios repartidos con anterioridad, como los 259.300 euros de un Euromillones, en septiembre del 2010; o los 925.000 de una Primitiva, en el año 2000.

Y es que desde primera hora de la mañana, no fueron pocos los habitantes de Peñíscola que comenzaron a preguntarse si un vecino suyo había sido el afortunado poseedor del único boleto acertante de la primera categoría de la Bonoloto del viernes.

“Con casi dos millones, metidos en el banco en un plazo fijo, uno se saca un buen sobresueldo, ¿no?”, detallaba uno de los curiosos que se acercó por la administración de lotería de la localidad.

Desde ayer, en Peñíscola, los chascarrillos por el inefable anuncio del sorteo de Navidad comparten protagonismo con este nuevo millonario anónimo.

Y mientras, Rovira confía en que este golpe de suerte contribuya a incrementar la venta de décimos para el Gordo. H