El Ayuntamiento de Burriana se pondrá en contacto con la Generalitat y la Diputación, las otras dos instituciones que en su día financiaron la construcción del edificio que debía albergar el Museu Tarancón, para analizar qué acciones toman después de que Mediterráneo publicase que el legado del célebre cardenal del municipio pasará a manos del colegio Salesiano.

En este sentido, el concejal de Cultura, Quique Safont, aseveró que estudiarán la situación con las otras partes para tomar medidas al respecto, ya que, “el recinto se diseñó específicamente para albergar su herencia”. En concreto, el convenio está firmado por el entonces conseller de Cultura, Fernando Villalonga; el expresidente provincial, Carlos Fabra; el exalcalde, Alfonso Ferrada, y el cura de El Salvador, Pedro Cid.

Los primeros se comprometían a aportar el dinero y el último a auspiciar el recinto que, una vez finalizado, se utilizó para albergar talleres prácticos para escolares, en el marco de la exposición Espais de Llum, y también como despacho y archivo parroquial, pero nunca llegó a ser el servicio cultural para el que se había levantado desde un principio.

A finales del pasado año parecía que todo se arreglaba, pero la familia del prelado se sintió ninguneada cuando solo le ofrecieron una pequeña sala diáfana de unos 20 m2 para acoger los ornamentos, pero no la doctrina y los documentos. De ahí que el sobrino de Tarancón haya decidido ceder las pertenencias a los Salesianos 20 años después de su muerte.

Al respecto, Safont explicó que la decisión da una “tranquilidad absoluta puesto que la disposición de la congregación salesiana ha sido siempre de aprecio, defensa y difusión de su patrimonio”, y añadió que la intención del Ayuntamiento es la de “continuar, como ha hecho hasta la fecha, dando a conocer su inigualable figura, básica para el entendimiento de la Transición española y la modernización de la Iglesia en España”.

Por su parte, el portavoz del PSPV-PSOE local, Javier Gual, apuntó que, por una parte, están “muy contentos” y dio las gracias a los Salesianos “por dar la oportunidad de conocer al cardenal”, pero criticó “la mala gestión del dinero público de las administraciones”. H