El Tribunal Superior de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha fallado en contra del Ayuntamiento de Burriana, que deberá indemnizar con cerca de 800.000 euros a un vecino de la localidad por la expropiación de una nave. Se trata de alrededor de 850 metros cuadrados que permitirán dar continuidad a la calle Baró desde la avenida Corts Valencianes hasta la intersección proyectada para poder unir la calle Abel Mus y la avenida de la Marina.

El demandante solicitó ante la Audiencia Provincial que se ejecutara en la expropiación lo serigrafiado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y el tribunal le dio la razón. Posteriormente, el pleno del Ayuntamiento burrianense aprobó un cambio en la ordenación urbana de la zona y, al mismo tiempo, ambas partes recurrieron la valoración dictaminada ante el TSJCV.

Ahora, una nueva sentencia ha fallado según la valoración demandada por el vecino, lo que supone un considerable incremento respecto a lo que, en un principio, dictaminó la Audiencia Provincial de Castellón.

Tras conocer la decisión judicial, el Ayuntamiento ha presentado un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, última instancia antes de que la sentencia sea firme. De este modo, lo que arrancó como una disparidad de criterios respecto a sobre en quién debía recaer el pago de la expropiación para la construcción de la calle, que estaba programada en el PGOU y que había solicitado el ciudadano afectado, ha terminado nuevamente en el Supremo, una audiencia en la que ya comienzan a acumularse los procesos abiertos en contra del Ayuntamiento de Burriana y todos ellos por disparidad de criterios sobre la indemnización que tiene que hacer efectiva. H