El Ayuntamiento de Benicàssim celebró ayer una reunión con motivo del inicio de la temporada con el objetivo de mejorar la calidad de los servicios que se prestarán este verano en las playas. El área de Turismo ha decidido intensificar los cursos que se realizan a los diferentes agentes municipales que trabajan cara al público durante la temporada “para recordarles e informarles de las tareas que deben desempeñar y de cómo deben atender las quejas y peticiones ciudadanas, así como cumplir las diferentes normativas para volver a superar las auditorías y mantener nuestro sello de calidad”, explicó la concejal de Turismo, Elena Llobell.

Y es que los agentes medioambientales se encargarán de velar porque se desarrollen las diversas tareas con los hábitos más adecuados correspondientes, “incentivando el reciclaje, el buen cuidado de la vegetación, jardines, arena y agua de las playas”, indicó la edila. Además, se busca garantizar el mejor servicio de las concesiones, como chiringuitos o puestos de hamacas, al igual que el de las oficinas de turismo.

En breve, a finales de junio o principios de julio, está previsto que el municipio tenga que pasar las auditorías correspondientes que le harán merecedor de los galardones turísticos que ha lucido hasta la actualidad. En este sentido, Llobell subrayó que el consistorio se marca el reto de no estancarse y continuar impulsando mejoras que contribuyan a una óptima calidad de los servicios, como es el caso del nuevo módulo adaptado para discapacitados en la playa Torre Sant Vicent. H