El Ayuntamiento de Vinaròs tuvo que aceptar la recepción de la obra de la plaza del convento de Sant Francesc porque su ejecución fue acorde al proyecto. Por lo tanto, no podrá reclamar a la empresa adjudicataria que solucione las deficiencias que el equipo de gobierno considera que presenta el proyecto y será el propio consistorio quien deberá hacerse cargo de subsanarlas, explicó ayer el alcalde, Enric Pla. En estos momentos, los servicios técnicos están elaborando las propuestas de actuación. Unas intervenciones que deberán tener la correspondiente autorización de la Conselleria de Cultura, y aún no hay fecha de apertura.

El primer edil reconoció que el acta de aceptación de los trabajos se rubricó con fecha 22 de diciembre --después de haber negado que lo fueran a realizar, como denunció el lunes el PP--, y que el consistorio “tuvo que hacerlo” porque la ejecución se ajustó al proyecto, pero matizó que en el propio acta se hace constar que hay aspectos inacabados, como que el césped no está consolidado o que las juntas entre las losas de piedra del pavimento de partes del ágora se hallan abiertas. La dirección de la obra considera que habría que esperar a que la hierba se consolide, un proceso que en verano se habría realizado.

Pla insistió en que la plaza tiene deficiencias que impiden que se abra al público --pese a que la arquitecta municipal lo negó en su informe oficial-- y que el Ayuntamiento dispone de otros dos informes que así lo avalan, uno de ellos el de Cocemfe Maestrat, que detectó varias barreras físicas.

Por otra parte, la oficina de renovación del DNI recuperará en abril la atención de dos días a la semana, hasta las 17.30 horas. H