El rebaño de vacas de Enrique Ferrando se marcha de veraneo hasta mediados del mes de octubre. El ganadero de la masía Tosca, de Ares del Maestrat, está realizando estos días su viaje trashumante hasta las montañas de Valdelinares, en la vecina provincia de Teruel.

Tres jornadas son necesarias para completar el recorrido de unos 60 kilómetros que realizan los 120 animales, entre las vacas, terneros, sementales y mansos, en el segundo viaje de estas características que ha realizado en las últimas semanas.

El primer día se realiza el camino entre la finca de Ferrando y el mas del Carro, situado en el término de Vilafranca. En la segunda jornada se cubre el tramo entre Vilafranca y Mosqueruela (Teruel), haciendo noche en fincas cercanas a la población de la comarca de Gúdar-Javalambre. Finalmente, el tercer día se completa el recorrido hasta Valdelinares.

Un viaje trashumante que se realiza mediante la conocida como Ruta del Llosar, y con el que se pretende que las vacas pasen el verano en una zona de alta montaña, con temperaturas mucho más frescas y abundantes pasturas. La hierba en Valdelinares ha mejorado mucho su condición respecto a los pronósticos iniciales de este año e, incluso, de los últimos meses, y espera la llegada de estas decenas de ejemplares de vacuno.

Este ganadero de la comarca de Els Ports ha contado con la colaboración de hermanos, y otros familiares en el trayecto. Entre las normas a seguir, es importante controlar bien al ganado, siendo imprescindible la ayuda para cortar la circulación, cara a cruzar las carreteras. Para hacerlo, se colocan chalecos reflectantes, a fin de que no surja ningún problema.

Los animales disfrutan así del ambiente agradable de un verano sin agobios de calor en las cordilleras del sur de Teruel. Después, tras más de tres meses allí, volverán a casa, donde el rebaño pasará el invierno. H