El concejal de la Agrupación de Residentes de Benicàssim (ARB), Carlos Díaz, acaba de incorporarse al equipo de gobierno como edil de Urbanismo y Actividades, tras firmar un pacto con el Partido Popular. Ya ocupó responsabilidades entre 1999 y el 2003, con Javier Asín como alcalde.

--¿Cómo se ha producido su entrada al equipo de gobierno?

--Hemos tenido un proceso que se ha alargado y ha habido cuestiones a resolver. La idea de ARB era incorporarse en las mismas condiciones que el equipo de gobierno, pero la oposición se oponía, Ciudadanos se abstenía y no había votos suficientes. Cobraré por asistencias, no hay problema.

--¿Cuáles son sus prioridades?

--Es fundamental que llegue a Benicàssim la CV-149, como tantos municipios que tienen comunicación a cuatro carriles con los centros urbanos. Vamos a empezar por los dos tramos iniciales, con la construcción de la rotonda de Mohíno y la creación del puente sobre el barranco de Farja. Otros asuntos son el contacto con Medio Ambiente para solucionar el humedal, el PAI Benicàssim Golf y los problemas de inundabilidad de las viviendas próximas. También estamos poniendo a punto Villa Santa Ana para el próximo verano.

--En Actividades, uno de los objetivos es tener la zona de ocio.

--Tenemos que dar prioridad al desarrollo de los sectores 3 y 4. No tenemos nuevo suelo para poder contar con estas actividades y el proyecto está en zonas que ya han tenido utilización con discotecas. Si está calificado y el uso es definitivo, la gente ya querrá invertir en adaptar los locales.

--¿Va a haber novedades referidas a este área de gestión?

--Sí. Vamos a adaptar la ordenanza, algo pendiente desde la aprobación de la nueva ley valenciana sobre espectáculos. Consistirá en una simplificación del proceso administrativo, liberalizando las actividades con declaraciones responsables y solicitudes por la vía más rápida, excepto en casos que afecten al interés general.