Los pueblos de Castellón honraron ayer a su patrón con una amplia programación de la que disfrutaron jóvenes y mayores. Muchas de las localidades de la provincia alargaron ayer las vacaciones de pascua para reunirse una vez más en hermandad y celebrar actos de recorrido tradicional.

Nules sacó a pasear por sus calles a los carros y carretas de peñas y grupos de amigos realizando un largo pasacalle en el que los quintos organizadores de la festividad protagonizaron junto con el resto del pueblo un largo recorrido que dio paso a una tarde cargada de fiesta y música en los casals, orquesta o en la playa. A última hora de las calles se vistieron de solemnidad para dar paso a la procesión.

También los quintos tomaron las riendas de la fiesta en Borriol y llevaron a su patrón a hombros hasta la ermita acompañados del Grup de Danses L'Hereu que hicieron una pequeña demostración.

La Vall acogió su acto más solemne con la procesión que se vivió con fervor. También se escuchó el sonido de la mascletà que puso punto y final a esta matinal. Misa y rendición de honores también en Onda en el barrio de la Morería a su patrón.

'Paseíllo' y misa en Moró acompañado de los famosos panecillos a modo de fogaseta que cerca de 1000 personas desgustaron como manda la tradición. L'Alcora sumó a sus fiestas la tradicional Romería de San Vicent con el traslado del santo desde la iglesia a la ermita presidio por las autoridades locales, la corte de honor, el clero y la colla Gegantera. Más tarde los alcorinos pudieron disfrutar de las actuación musical de la Agrupació Musical l'Alcalatén y de la tradicional Mocadorà.