La Mostra 1900 de Vilafamés registró ayer un lleno completo, con visitantes procedentes de toda la provincia, que no quisieron perderse la recreación de las costumbres de la localidad en los primeros años del pasado siglo. El alcalde, Abel Ibáñez, explicó que el nivel de participación «ha sido impresionante, y calculamos que han pasado más de 5.000 personas». Los restaurantes agotaron sus plazas «e incluso tuvieron que habilitar tres y cuatro turnos, lo que da una idea de que la iniciativa ya ha adquirido un carácter de acontecimiento comarcal», añadió el munícipe.

Si el programa del sábado se vio influido negativamente por la lluvia, la mejora de las condiciones meteorológicas animó a la asistencia en su segunda jornada, a la espera de que hoy vuelva a darse una gran afluencia. Uno de los factores que explican el éxito de la actividad es la implicación de los propios vecinos, que se visten como sus antepasados y reproducen unos oficios y tradiciones que, de no ser por este multitudinario evento, quedarían totalmente en el olvido.

NUEVAS IDEAS // En el transcurso de sus ediciones, han sido muchas las propuestas incorporadas al programa. Algunas de ellas se han convertido en clásicas, como la corrida de toros o la indumentaria de guardias civiles. A pesar de ello, el primer edil añadió que siempre «estamos planteando nuevas ideas y en este año hemos hecho la reproducción de un velatorio de aquellos tiempos». Tras la representación de bodas, juegos infantiles, rondas de quintos o cucañas, la muerte se incorpora a esta iniciativa. Además, en este año se ha incrementado la presencia de los animales.

El día de clausura cuenta con la muestra de patrimonio religioso en la iglesia parroquial, que incluye ornamentos sagrados, tejidos y pinturas de los siglos XVI al XX. El programa contempla la visita de los toreros a la capilla, para encomendarse por una buena lidia, a partir de las 12.30 y las 19.00 horas. La celebración del matrimonio es otra de las citas más esperadas, con sesiones a las 13.00 y las 19.00 horas. El punto final a esta convocatoria llegará a las 20.00 horas, con la procesión de Sant Miquel, desde la iglesia de la Sangre a la parroquia.