Gecen solicita a la Conselleria de Medio Ambiente que no permita actividad alguna en las 300 hectáreas quemadas en el parque natural del Prat de Cabanes-Torreblanca. La asociación exige que el Consell no autorice la caza, la ganadería ni cualquier otro uso en suelo calcinado. «Si quien ha quemado el parque natural pretende obtener algún beneficio de ello se debe impedir», manifiesta el colectivo ecologista. rd