La plaza de la Iglesia y las calles del centro histórico de Alcalà de Xivert fueron el escenario de la Passió per la Trencà, un espectáculo que culminó el Viernes Santo en esta localidad. Más de 60 actores, y un número parecido de músicos, participaron en la obra, que alcanzó la quinta edición y se ha consolidado como un evento capaz de reunir a cerca de 1.000 espectadores, y que implica a diferentes colectivos del municipio.

La representación se une a los tradicionales actos religiosos, que incluyeron el vía crucis matinal, la conmemoración de la muerte del Señor en la parroquia y la procesión del Santo Entierro. A partir de las 22.00 horas, el público se congregó en las 800 localidades dispuestas. Cristian Mañes volvió a ser el intérprete que encarnó a Jesucristo, y estuvo presente en la mayoría de las escenas, como la llegada a Jerusalén, la oración en el huerto de los olivos o la resurrección, que puso la emoción en el punto final.

Atracción turística

La presencia de visitantes de Alcossebre demostró la capacidad de atracción de este evento, cuyos ensayos se sucedieron en las últimas semanas, y que tuvo la participación del grupo de bombos y tambores El Repiquet, desde donde surgió esta iniciativa hace un lustro.

En cuanto a la programación del núcleo costero, hoy está prevista una salida en bicicleta por zonas de cultivo y espacios naturales, y mañana hay una ruta teatralizada en la zona de Capicorb dedicada a los más pequeños.